El presidente checo no descarta un cambio en la política de apoyo a Ucrania tras las elecciones de octubre
El presidente de la República Checa, Petr Pavel, no descartó un cambio en la política gubernamental respecto al apoyo a Ucrania después de las elecciones parlamentarias de octubre de este año.
Así lo dijo en una entrevista con la BBC, informa Ukrinform.
Pavel no descartó que las elecciones conduzcan a un cambio de gobierno y dejó claro que las prioridades de un posible nuevo gobierno aún son difíciles de evaluar.
"Ahora todos mis esfuerzos se centran en mantener un enfoque unificado en materia de seguridad y defensa, incluida nuestra política hacia Ucrania. Porque creo que apoyar a Ucrania es parte integral de nuestra propia seguridad", dijo Pavel.
Se señala que la República Checa, bajo el mando de Pavel, es uno de los aliados más leales de Ucrania. Su iniciativa más destacada es el programa de suministro de proyectiles de artillería a las Fuerzas Armadas de Ucrania.
Anteriormente, Pavel prometió que esta iniciativa “no se verá amenazada de ninguna manera”.
En la entrevista con la BBC, el presidente checo dijo que trataba estos temas con todos los líderes de los partidos parlamentarios que, de una forma u otra, formarían parte del próximo gobierno.
"Hablé con ellos de la necesidad de mantener los mismos principios en materia de seguridad y política exterior incluso después de las elecciones. Sin embargo, por supuesto, no puedo ofrecer garantías ahora; mucho dependerá de sus resultados", declaró el presidente checo.
Según Pavel, en 2024 la República Checa pudo suministrar a Ucrania alrededor de 1,5 millones de unidades de munición de gran calibre, y este año el volumen de suministros será de 1,8 millones, de los cuales alrededor de 800.000 son del calibre 155 mm.
"Hace dos años, los ucranianos estaban en tal desventaja que su capacidad de fuego, comparada con la de Rusia, era de 1 a 10. Ahora, esta proporción es de aproximadamente 1 a 2. Esto significa que, con un flujo constante de munición, el mando ucraniano puede permitirse el lujo de planificar, porque sabe exactamente lo que recibirá en los próximos meses", declaró el presidente checo.
Pavel también pide a otros líderes occidentales que enfrenten la realidad, aumenten la presión sobre el presidente ruso Putin y lo obliguen a sentarse a la mesa de negociaciones.
Según Pavel, está abierto a negociar con el líder ruso, pero sólo con la condición de que Rusia aborde el diálogo desde una posición realista y no con su habitual agenda inflexible.
El presidente checo también advierte que Rusia está explotando los sistemas democráticos occidentales y librando una guerra híbrida en toda Europa, recurriendo al espionaje, el sabotaje, los ciberataques y la difusión de desinformación.
Según él, la República Checa intensifica sus esfuerzos para impedir que los agentes rusos operen libremente. “La inteligencia rusa realiza tantos intentos de sabotaje en nuestro territorio que simplemente tenemos el deber de proteger a nuestra sociedad”, añadió Pavel.
Las elecciones parlamentarias en la República Checa están programadas para el 3 y 4 de octubre de este año. Por primera vez, los checos residentes en el extranjero podrán votar, lo que aumenta potencialmente la participación.
Uno de los candidatos más probables para el puesto de jefe de gobierno en el nuevo gabinete, en caso de victoria de la oposición, es el ex primer ministro del país (2017-2021) y líder del movimiento ANO, Andrej Babis. Según la BBC, la incertidumbre de Petr Pavel sobre el futuro de la República Checa podría estar relacionada con su nombre.
El gobierno checo está actualmente liderado por Petr Fiala, representante del centrista Partido Cívico Democrático. Es conocido por apoyar a Ucrania en su resistencia a la agresión rusa.