El G7 promete evitar una crisis alimentaria mundial

Los países más poderosos del planeta se comprometen a que la guerra entre los dos países europeos más grandes del mundo no provoque en una crisis de hambre.

Así se afirma en una declaración de los jefes de Estado y Gobierno del Grupo de los Siete (G7), tras su reunión en Bruselas el 24 de marzo, informa Ukrinform.

La guerra de Putin amenaza la recuperación de la economía mundial, socava la estabilidad de las cadenas de suministro globales y tendrá un grave impacto en los países más frágiles, reconocen los líderes del G7 y prometen apoyar a los más vulnerables.

En particular, se refiere a la prevención de la crisis alimentaria mundial, ya que, a corto plazo, la guerra del presidente Putin aumenta la presión sobre la seguridad alimentaria mundial. Las sanciones impuestas a Rusia, dicen los políticos, tienen en cuenta la necesidad de evitar un impacto en el comercio agrícola mundial.

Los países del G7 utilizarán sistemáticamente todos los instrumentos y mecanismos de financiación para garantizar la seguridad alimentaria y hacer que el sector agrícola sea resiliente de acuerdo con los objetivos climáticos y ambientales.  Se esforzarán por garantizar un suministro estable de alimentos en Ucrania y apoyarán los esfuerzos en curso de la producción ucraniana.

Los líderes del G7 trabajarán con organismos internacionales relevantes como el Programa Mundial de Alimentos (PMA), en paralelo con bancos multilaterales de desarrollo e instituciones financieras internacionales, y aumentarán su contribución conjunta a estos organismos para apoyar a los países que enfrentan una inseguridad alimentaria aguda.

Los signatarios de la declaración piden que se convoque una reunión extraordinaria del Consejo de la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO) para considerar las consecuencias de la agresión de Rusia contra Ucrania para la seguridad alimentaria y la agricultura mundiales. Hacen un llamamiento a todos los participantes en el Sistema de Información sobre el Mercado Agrícola (AMIS) para continuar intercambiando información y explorando formas de mantener los precios bajo control.

Los países prometen evitar las prohibiciones de exportación y otras medidas restrictivas del comercio, apoyar mercados abiertos y transparentes y alentar a otros a hacer lo mismo de acuerdo con las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC).

Los líderes del G7 también prometen tomar medidas adicionales para reducir su dependencia de la energía rusa, garantizar una alternativa segura y un suministro estable, y coordinar estrechamente los esfuerzos en caso de posibles interrupciones del suministro. Apoyarán activamente a los países que también quieran liberarse gradualmente de la dependencia de las importaciones rusas de gas, petróleo y carbón.

Los signatarios de la declaración hacen un llamamiento a los países productores de petróleo y gas para que actúen de manera responsable y aumenten los suministros a los mercados internacionales, y la OPEP juega un papel clave en esto.

Trabajaremos con ellos y todos los socios para garantizar un suministro de energía global estable”, dicen los líderes del G7. También enfatizan que esta crisis fortalece su determinación para lograr los objetivos climáticos al acelerar la reducción de su dependencia de los combustibles fósiles y la transición hacia energías limpias.

La Cumbre del G7 se celebró el 24 de marzo en Bruselas por iniciativa de Alemania, que preside el Grupo.

SM