“Voluntarios de Donbás”. Campaña por Europa

La abreviatura SDD en la película “El consejero de Estado” (la trama narra cómo la policía secreta zarista rusa utiliza los terroristas para sus propios fines) se traduce como “Se devoren unos a otros”.  No creo que fuera casual el hecho de que el Kremlin nombró con esta abreviatura a un grupo de bandidos contratados para devastar la tierra ucraniana. Oficialmente,  la abreviatura SDD, con la que fue nombrado este grupo de bandidos, se descifra como “Unión de Voluntarios de Donbás” (Soyuz Dobrovoltsev Donbassa, SSD). Pero Surkov (originalmente Dudayev), con toda la deshumanización, siempre tenía un gran sentido del humor, y esta coincidencia puede que no sea casual.

Visitando de vez en cuando a esta SDD en Donetsk y Lugansk, Surkov-Dudayev dio instrucciones de `hacer una pausa  en los ataques. Y a su pregunta “¿Qué tenemos que hacer?”, respondió: “Pueden hacer figuras de madera y venderlas”. Estas palabras fueron pronunciadas por Surkov-Dudayev a principios de 2015. Sin embargo, ya en varios meses el consejero de Estado encontró un nuevo uso de los terroristas.

Recordemos la historia de la Unión de Voluntarios de Donbás (SDD, por sus siglas en ruso). Su creación se remonta a principios de 2015, y su primer jefe fue el terrorista ruso y analista político Alexandr Boroday, ciudadano de Rusia.

En el mundo no hay persona más triste que un analista político no reclamado. El experto, cuyo título fue dedicado a los conflictos étnicos, y cuya actividad se limitaba a la ciencia política, el periodismo y  el asesoramiento de los que perdieron la cabeza por la idea imperial de oligarcas, siempre quería más. Quería, por ejemplo, ser primer ministro… Y si en Rusia, todos los mejores lugares están ocupados por los hombres rápidos, se puede convertirse en primer ministro, por ejemplo, de un enclave separatista. Y si no encabezar un poderoso flujo de gas,  al menos un flujo de chatarra de las fábricas desmanteladas en el territorio de Ucrania. Se puede robar petrodólares rusos no en el Kremlin, sino “serrarlos” en Donbás. Y si entra en otros negocios ilegales, puede ser rico y famoso.

Dirigiendo medio año el enclave de la RPD (República Popular de Donetsk), Boroday dijo que su tarea de “gerente de crisis” se acabó, dijo a todo el mundo que la RPD se convirtió en un verdadero Estado, y decidió crear la misma SDD (Se devoren unos a otros).

Hace poco más de un año, en Moscú, en un congreso constitutivo, se reunieron  unos quinientos delegados, según los organizadores, eran “veteranos de la guerra en Ucrania”. Asistieron los hombres vestidos de gorros de cosacos, veteranos en sillas de ruedas, asistió el “ministro” de “seguridad estatal de la RPD”, en una palabra, todos los que se cansaron de hacer figuras de madera según el consejo de Surkov-Dudayev.

Llegaron no sólo para pedir el dinero de los contribuyentes rusos, aunque esto también (la agenda incluyó la reivindicación de beneficios y ayuda material a los “veteranos de guerra en Ucrania”), desde la tribuna se anunció que la SDD debe estar lista para defender a “nuestro país”, si es necesario. Y “nuestro país es allí donde vive la gente rusa”. Además, Boroday dijo que esperaba la actitud favorable de las autoridades.

"EL SERRADO" DEL GOLPE DE ESTADO EN MONTENEGRO

No fue tan fácil encontrar esta “gente rusa”  pisoteada por los sangrientos perros de la SDD gracias al favor del Kremlin. Lo más principal fue encontrar un país que piensa en adherirse a la OTAN, allí seguramente hay “compatriotas rusos”, sus “rusos profesionales”, cosacos anhelantes por alcohol y petrodólares rusos, que no pueden esperar dar beso fraternal no gratuito a los mercenarios vestidos de gorros de cosacos. Y echar una mano durante los disturbios, si es necesario. ¿Somos cosacos, o no?

En diciembre de 2015 fue creada representación de la SDD en los Balcanes. Aquí, junto con Boroday aparece en la escena otro compañero de armas, Viktor Zaplatin. Un viejo mercenario ruso (según su propia confesión, guerreó en Transnistria, el este de Bosnia, Abjasia) da entrevistas detalladas a los medios rusos sobre el “hecho de armas de los voluntarios” desde los tiempos de Peresvet y Oslyabya hasta los tiempos de Transnistria y Donbás.

Según los medios, de acuerdo con tarea de Boroday y Surkov, bajo la supervisión directa de Zaplatin, en 2016 se crean dos organizaciones públicas: la Unión de voluntarios de los Balcanes y  la Unión de Cosacos de los Balcanes “Ejército de Cosacos de los Balcanes”. De hecho, estas organizaciones unieron los mercenarios prorrusos de Montenegro, Serbia, República Srpska, Macedonia, Grecia, Bulgaria y Rusia, que participaron en diferentes conflictos militares con la bandera de Rusia (incluidos los conflictos en Ucrania y Siria).

En junio de 2016, en la cripta de la Catedral de la Resurrección de Cristo de Podgorica se celebró un evento solemne de la Unión de Voluntarios de Donbás y una velada de amistad ruso-montenegrina. Durante la reunión se anunció la creación de una organización de voluntarios cosacos con una tradición militar en los Balcanes.

En septiembre de 2016 en la ciudad montenegrina de Kotor se celebró la primera reunión de la Unión de Cosacos de los Balcanes. La fiesta de dos días con canciones, danzas y fraternización del pueblo de Serbia y Montenegro y los pueblos de Rusia. Aquí mismo se celebró la conferencia de la SDD, así como un mitin contra la OTAN. A propósito, en el evento estuvo presente personalmente Boroday.

Un mes más tarde, en octubre, las flores se convirtieron en bayas bastante maduras.

El fiscal de Montenegro, Milivoje Katnić, informó sobre la detención de un grupo de militantes (el día de las elecciones parlamentarias en el país) por la sospecha de organizar los actos terroristas, preparar la toma de las instituciones estatales y la liquidación del primer ministro del país.  Más tarde se supo que los conspiradores eran un grupo de 20 combatientes de Serbia, Montenegro y Rusia, algunos de ellos guerrearon al lado de los terroristas de Donbás. Las acciones de grupo fueron coordinadas por los nacionalistas rusos.

En el hecho de que no lo hicieron sin ayuda rusa, indicó lo siguiente. A los miembros del grupo les incautaron 120.000 euros y uniforme de las fuerzas especiales de Montenegro. Serbia deportó a todos los rusos detenidos, hasta la fecha no se hacen públicos sus nombres. Los militantes serbios y montenegrinos fueron detenidos en la capital de Montenegro, Podgorica. Moscú negó inmediatamente los eventos mencionados, pero a finales de octubre envió a Belgrado el secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Nikolay Patrushev (confirmando así su complicidad directa en el golpe de Estado), que justificándose, aseguró al gobierno de Serbia que los conspiradores actuaron de forma independiente, sin autorización del Kremlin. De acuerdo con algunos informes, él llegó simplemente para liberar a los mercenarios.

Los observadores y analistas no dudaron que las autoridades rusas quisieron organizar un golpe de Estado. Sin embargo, sugirieron que puesto que los realizadores serraron el dinero asignado para el golpe, los aliados montenegrinos fueron directamente a las fuerzas especiales de Montenegro y entregaron con menudos la SDD balcánica.

Cosacos son cosacos, decidieron ellos, pero el país de Montenegro va a la OTAN. Así será más seguro.

Bueno, vamos a imaginar otro escenario. No se engañe con una final feliz. Después de todo, no importa lo que era, “los expertos en conflictos étnicos con experiencia de trabajo de ministros y jefes de los servicios fronterizos” en los territorios cortados por Rusia, crearon sus organizaciones en los Balcanes.  Puede reírse de los cosacos y payasos, pero ellos pudieron seleccionar las personas de la población local. Pudieron causar un par de impresiones.

Tal vez, en el lenguaje profesional se podría decir: “Surkov y Co. utilizaron las organizaciones arriba mencionadas con el fin de crear organizaciones de amparo para preparan un golpe de Estado en Montenegro y trasladar a los militantes a Podgorica”.

No obstante, no se puede considerar terminada esta historia. Los mercenarios están todavía dispuestos a ponerse a disparar. Y es poco probable que las autoridades del Kremlin les privaran de postre por una operación fallida. Más bien, fueron conservados.

Esta historia no se refiere a Ucrania, sino a Europa. Y el éxito de su proyecto depende en gran medida de si ella entiende que Rusia tiene una gran cantidad de tales generales, y ellos ven la frontera rusa más allá de la que fue determinada en 1945.

Lana Samokhvalova, Kyiv

SM